Cómo Preparar Hígado para que Sepa Delicioso

Afrontémoslo: el hígado no es precisamente el plato favorito de muchas personas. Ya sea por su sabor peculiar o su fuerte olor al cocinarlo, suele generar cierto rechazo en la mesa. Sin embargo, ¿qué pasaría si te dijera que hay una manera de transformar este humilde ingrediente en una auténtica delicia culinaria?

Hoy te invitamos a descubrir el arte de preparar un exquisito hígado encebollado, una receta que, además de ser increíblemente sabrosa, te permitirá aprovechar al máximo todas las propiedades nutritivas de este órgano tan subestimado. Sí, así como lo oyes. Con esta receta, no solo disfrutarás de un plato delicioso, sino que también estarás proporcionándole a tu cuerpo una buena dosis de vitaminas y minerales esenciales para tu salud.

Así que prepárate para dejar atrás tus prejuicios y sumergirte en un mundo de nuevos sabores. Con esta receta, el hígado dejará de ser ese ingrediente temido para convertirse en el protagonista indiscutible de una experiencia gastronómica inolvidable. ¡Acompáñanos en este viaje culinario y descubre el placer oculto del hígado encebollado!

Para esto necesitamos los siguientes ingredientes, y no te preocupes que todos son excelentes para tu salud y cuerpo!

Ingredientes:

-
1 cebolla grande
- 1/2 kg de hígado de res
- Aceite de oliva
- Perejil fresco
- 1 chorro de vino (tinto o blanco, según tu gusto)
- 1/2 taza de caldo de carne o pollo
- Sal y pimienta al gusto

Preparación:

1.
Preparación Preliminar: Comienza cortando la cebolla en julianas o rodajas finas. En una sartén grande, calienta un generoso chorro de aceite de oliva a fuego medio.

2. Cocción de la Cebolla: Agrega las rodajas de cebolla a la sartén y sazona con un poco de sal. Cocina las cebollas hasta que estén suaves y translúcidas, pero aún con un poco de firmeza. Este paso es crucial para agregar dulzura y profundidad a tu plato.

3. Sellado del Hígado: Una vez que las cebollas estén listas, aparta un espacio en el centro de la sartén y coloca el hígado. Cocina el hígado hasta que esté dorado por ambos lados, pero asegúrate de no sobrecocinarlo para evitar que se vuelva seco.

4. Sabor y Aromas: Es hora de agregar los sabores característicos. Sazona el hígado con sal, pimienta y perejil fresco picado al gusto. Luego, vierte un buen chorro de vino (tinto o blanco, según tu preferencia) y deja que se evapore el alcohol.

5. El Toque Final: Una vez que el alcohol se haya evaporado, agrega el caldo de carne o pollo a la sartén. Tapamos la sartén y dejamos cocinar a fuego medio durante unos 10 minutos, o hasta que el líquido se reduzca y se forme una salsa sabrosa alrededor del hígado.

6. Servir y Disfrutar: Ahora sí, el momento más esperado ha llegado. Sirve el hígado encebollado caliente, acompañado de arroz blanco o tus guarniciones favoritas. 

¡Y listo! Con estos sencillos pasos, has preparado un hígado encebollado digno de los mejores cumplidos. Recuerda que la clave está en el equilibrio de sabores y en no sobrecocinar el hígado para mantener su jugosidad y textura perfecta.

Ahora, ¿quién dice que el hígado no puede ser una delicia culinaria? Anímate a probar esta receta, mandanos una foto de tu plato y cuentanos que tal te pareció!

¡Buen provecho!
Te invitamos a leer también cuánto hígado de res se debe comer a la semana.

Posdata: Sabemos que el hígado no es para todo el mundo, así que si tu ya intentaste esta receta y definitivamente viste que no te gusta el hígado de ninguna manera, te queremos presentar Galeno. Galeno es Hígado de Res en una capsula y lo mejor de todo es que es un producto proveniente al 100% de carne de res colombiana de pastoreo. Con solo una capsula podrás obtener los mismos beneficios que obtendrías al comerte un delicioso hígado encebollado.

Haz click acá para obtener el tuyo